Amigas seguimos firmes y cada día más fuertes en nuestro propósito, el Ayuno llega al sexto día y estoy segura que cosas extraordinarias han pasado y están por pasar en nuestras vidas.
Quiero hoy hablar de algo muy especial que Dios ha estado hablando conmigo estos últimos días:
"Cierto día, en el mes de Abib, le llevé vino al rey Artajerjes. Como nunca me había visto triste, 2 el rey me preguntó:
—¿Qué te pasa? No te ves enfermo. Esa cara triste me dice que debes estar preocupado.
Sentí mucho miedo en ese momento, 3 y le dije al rey:
—¡Deseo que Su Majestad viva muchos años! La verdad, sí estoy triste, y es que la ciudad donde están las tumbas de mis antepasados está en ruinas. Sus portones han sido destruidos por el fuego.
4 El rey me preguntó:
—¿Hay algo que pueda hacer por ti?
Yo le pedí ayuda a Dios, 5 y le contesté al rey:
—Si le parece bien a Su Majestad, y quiere hacerme un favor, permítame ir a Judá, para reconstruir la ciudad donde están las tumbas de mis antepasados.
6 El rey, que estaba acompañado por la reina, me preguntó cuánto tiempo duraría mi viaje y cuándo regresaría. Yo le dije cuánto tardaría, y él me dio permiso para ir." Nehemías 2:1-6 TLA
Nehemías siervo de un rey, viviendo con todas las comodidades que un palacio te puede dar, tenia su corazón triste, —¿Qué te pasa? No te ves enfermo. Esa cara triste me dice que debes estar preocupado. 2:2 pero no lo estaba por sus problemas, él estaba triste por el padecimiento de su pueblo, aquí es donde quiero que pongamos especial atención; porque, mi amiga tu que deseas tener la plenitud de Dios dentro tuyo y te esfuerzas por tenerlo contigo, muchas veces no alcanzas ese milagro por estar tan preocupada por ti misma, porque quedas triste con cada pequeño problema que acontece en tu vida, olvidando que tu tienes un Dios poderoso que te librará de todo mal que, te cuida a diario, mientras otras personas allá en el mundo no lo tienen, están sufriendo de verdad, porque piensa conmigo a veces para nosotras que estamos en la fe las cosas se ponen difíciles pero logramos resistir, como es que una persona que no tiene a Dios supera todas las probaciones, para ellos es mucho pero mucho más difícil, pero pocas veces quedamos pensando en eso y solo miramos para nosotras mismas.
Cuando Dios me mostró esto en una reunión de la FJU yo me di cuenta como nosotras mismas podemos hacer que todo cambien, en ves de quedarnos tristes y acongojadas por lo que no ha pasado de bueno en nuestras vidas, salgamos del palacio, salgamos a buscar los que verdaderamente están sufriendo lejos de Dios, cuando hacemos eso estamos agradando a Dios, cuando lo buscamos en medio de un mundo donde el diablo se ha apoderado de todo y lucha sin descanso porque los que son de Dios caigan y los que no son de Dios aun no lleguen nunca a conocerlo, cuando nosotras no nos limitamos a solo ser unas religiosas que oran y leen la biblia, sino que nos comportamos como siervas de nuestro Señor Altísimo fuera de la Iglesia, entonces cuando entramos a la Iglesia recibimos de todo el poder de Dios en nuestro interior, entonces recibimos el Espíritu Santo, así como con Nehemias Dios permite que los deseos de nuestro corazón se cumplan: "Si le parece bien a Su Majestad, y quiere hacerme un favor, permítame ir a Judá, para reconstruir la ciudad donde están las tumbas de mis antepasados.
6 El rey, que estaba acompañado por la reina, me preguntó cuánto tiempo duraría mi viaje y cuándo regresaría. Yo le dije cuánto tardaría, y él me dio permiso para ir." 2: 5-6.
Entonces amiga que vas a hacer con este tesoro, te quedaras sentada haciendo las mismas cosas o vas a empezar a llamar la atención de tu Dios.
En la fe,
Rocío Rincón