“Dad, y se os dará; medida buena, apretada, remecida y rebosando darán
en vuestro regazo; porque con la misma medida con que medís, os volverán a
medir.” Lucas 6:38
Buena: dos de los significados apropiados para contextualizar este versículo son:
(1) Bastante, suficiente (2) Apropiado
para un fin
Apretada: poner mayor interés o cuidado en algo o aumentar la intensidad
con la que se trata una situación se trata de ser más riguroso
Remecida: la palabra remecer significa: mover continuamente de un
lado a otro una cosa.
Rebosando: Abundar una cosa o ser numerosa en exceso
Ahora si hacemos una lectura del versículo a través del significado de
cada una de estas palabras, esto sería lo que nuestro Señor Jesús nos enseña:
Cuando damos estamos apenas haciendo lo apropiado es decir lo justo, no solo
es bueno sino que es bastante bueno…
Cuando damos estamos demostrando con hechos el interés real que tenemos
hacia las demás personas o situaciones, entregándonos de manera rigurosa, en
otras palabras poniendo a disposición de los demás lo mejor de nosotros
aumentando en intensidad dependiendo de cada situación….
Cuando damos de todo corazón en lugar de tener menos para dar que sería
un pensamiento lógico, lo que en realidad hacemos es hacer espacio para dar más
porque en la media que damos así recibimos y tenemos condición entonces de
seguir dando…
Cuando damos somos más bendecidos porque en nuestra condición para dar,
logramos también obtener muchos más de lo que esperamos pues empezamos a
recibir y no pequeñas cantidades, no mis amigas, recibimos hasta rebozar.
Meditando en este versículo podemos ver que somos más bendecidos cuando
damos que cuando recibimos, normalmente las personas en el mundo creen que si
dan lo que tienen quedaran sin nada es más hay un dicho popular que así lo
expresa “El que da lo que tiene, a pedir se queda” sin embargo es claro para
nosotras que no es así cuando tenemos una relación con nuestro Señor Jesús.
Pues desde el momento que entregamos nuestras vidas de todo corazón a
Él, entonces Él nos empieza a dar (dirección, entendimiento, bendiciones en
todas las áreas de nuestras vidas) y en la medida que nosotros compartimos todo
eso que nuestro amado Señor nos da, hacemos espacio para recibir mucho más.
Porque imaginen la situación, desde el momento que tuvieron su primera
experiencia con Dios hasta hoy, ya Él les ha mostrado muchísimas cosas, que si
simplemente las guardamos con egoísmo nos llenaremos tanto que no tendremos más
espacio para que nuestro Señor nos siga enseñando, un ejemplo claro es nuestro
closet esta tan lleno de ropa que no usamos, de hace muchos años que ya no
queda bien en nuestro cuerpo pero esta hay colgada, ese lindo vestido que
compraste hace años y te quedaba muy bien pero ahora estas más gordita y te
ajusta demasiado, no lo usas pero sigue allí colgado, casi no cierra el closet
de tanta cosa que tenemos allí inútil y no llega nada nuevo, sin embargo cuando
hacemos una limpieza general, el queda liviano y con espacio suficiente para
que entre cosas nuevas en poco tiempo ese closet estará renovado y con un aire
mucho mejor.
Pero lastimosamente no siempre hacemos esto pues guardamos y guardamos, dejando nuestros espacios tanto
materiales como espirituales cada vez más llenos, pensando que quizá no vamos a
recibir lo que queremos o que nos va a faltar aquello que damos y sabemos que
no es así, tenemos que convencer a nuestra mente de eso y dejar de oír nuestro
corazón, porque escrito esta Dad y se os dará, entonces dejemos espacios libre
para todo lo nuevo que el Señor Jesús nos tiene preparado, para así tener
muchas experiencias maravillosas que
compartir dejando a nuestro amado Señor crecer y menguando nosotras.
Desafío godllywood 35 limpiando mi armario y haciendo espacio para una renovación